¿Cómo podemos estimular la psicomotricidad en los niños y niñas?
La psicomotricidad es la relación que se establece entre el pensamiento o actividad psíquica y el movimiento voluntario del cuerpo. En otras palabras la motricidad correcta se presenta cuando un niño piensa en tomar un objeto con la mano y este acto se efectúa con la precisión adecuada, en el tiempo estimado y tras la orden o estímulo correcto.
1. El movimiento
Una de las actividades más fáciles de emplear para ejercitar la psicomotricidad de los niños de 1 y 2 años es fortalecer sus músculos tanto de las piernas como de los brazos. Así, las canciones donde ellos deben mover su cuerpo, baila o levantar y bajar sus brazos de forma coordinada son excelentes ejercicios para comenzar a estimular la psicomotricidad.
2. Al compás de la música
Todo movimiento es más fácil de coordinar si les proporcionamos a los niños música.
3. Contar un cuento
La finalidad de contar un cuento para estimular la psicomotricidad, implica que ellos se sorprendan o asombren participando de lo que le sucede al personaje. Así el movimiento de los músculos faciales (mover ojos y boca) expresando asombro, entusiasmo, miedo o intriga permite a los niños estimular su motricidad.
4. Capturando moscas
Un juego donde los más pequeños estimulan la psicomotricidad es el de “capturar moscas”. Para ello necesitaremos dibujar unas cuantas moscas de diferentes tamaños en papel. Luego utilizamos un matamoscas y les ayudamos a pisar las moscas. Podemos empezar colocando solo dos o tres moscas sobre la mesa y a medida que el niño va comprendiendo el juego se pueden agregar más cantidad de moscas. También se puede realizar el juego en equipos.
5. Formando filas con cubos
Los cubos de diferente tamaño y color ayudan a los niños a distinguir figuras, formas y colores.
Haz que el niño agrupe los diferentes cubos según el color.
6. Pateando una pelota
El simple hecho de jugar con un balón (arrojarlo con las manos o con el pie) permite estimular la motricidad gruesa.
7. Juguetes con cuerdas
Los juguetes con cuerdas ayudan a que los niños desarrollen y midan la fuerza que ellos deben emplear. No solo les ayuda a fortalecer los músculos sino que también les sirve para regular la misma en relación con el peso del juguete.
8. Juegos de encaje (o encastre)
Los juegos de encaje ayudan al niño a reconocer las diferentes figuras geométricas. La finalidad de los juegos de encaje (o encastre) es que ellos logren introducir la mayor cantidad de figuras geométricas dentro de una caja que posee una abertura circular (por la que solo es posible el paso de un círculo), una abertura triangular (por la que solamente es posible el paso de un triángulo) y una abertura cuadrada (por la que solo es posible introducir un cuadrado).
Fuente: EducaPeques